Conferencista en vida Cristiana Dr. Edwin Lemuel
Sé la mejor versión de la película de tu vida
Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica.
—Efesios 2.10 (NVI)
Película de tu propia vida
¿Te gustaría trabajar en una película de tu propia vida? Si es así, ¿qué género escogerías? ¿Drama? ¿Acción? ¿Comedia? ¿Suspenso? ¿Horror?
A decir verdad, cuando nacemos todos recibimos esta oportunidad. Ahora, si quieres mejorar ese libreto, te invito a seguir leyendo.
Lo primero que tienes hacer es ponerte en contacto con el productor e informarle que estás interesado en protagonizar tu propia historia.
Segundo, tienes que seguir al pie de la letra las instrucciones del director.
Tercero, vas a recibir un libreto y tienes que aprendértelo de tapa a tapa.
Y, finalmente, tienes que representar la mejor versión de ti mismo.
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Artículos de interés:
Aprende a ser tu mejor versión
En Efesios 2.10 (NVI) encontramos la línea de entrada para ese libreto de vida:
«Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de antemano a fin de que las pongamos en práctica».
No permitas que nada bloquee la capacidad y la obra única que Dios te asignó. Aprende a conocer y a ser tu mejor versión.
Todos nacemos con talentos y dones únicos asignados por Dios. La Biblia dice que Dios los repartió a todos según le agradó. Y estos dones son herramientas especiales que ponemos al servicio de los demás y el nuestro.
«Tenemos dones diferentes, según la gracia que se nos ha dado» (Romanos 12.6, NVI). Y todo lo que Dios hizo es bueno y él desea que desarrollemos nuestro potencial al máximo. No podemos bloquear nuestro potencial encasillándonos en lo mismo que hicieron generaciones pasadas. Dios te hizo nuevo y original. Todo lo que hagas tendrá un toque exclusivo, una marca personal y única, que nadie, nadie podrá repetir. Cada uno de nosotros es un hijo único y exclusivo del Padre creador.
Lo que hagas hoy se puede perfeccionar, se puede multiplicar y se puede expandir sin límites. La incredulidad y el temor son tus únicos obstáculos. Si no estás en el lugar que deseas, ¿qué esperas para salir? ¡Usa tu fe y camina hacia tus sueños! No te detengas... ¡no hay edad de retiro!
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No te adaptes a las circunstancias
Tú y yo somos los protagonistas de nuestras vidas.
Cada uno de nosotros tiene que mover el cuerpo, el alma y el espíritu hacia el destino de grandeza que Dios nos preparó de antemano.
Esfuérzate en dejar atrás la vida carnal de pecado, de desobediencia, pide perdón por tus faltas y avanza hacia tu meta.
Pídele a Dios que te alumbre para ver los obstáculos, los pecados ocultos y las actitudes negativas que te detienen.
Dios no quiere que esperes más, ¡quiere cambiarte ya!
Quiere tener un encuentro contigo hoy mismo, ¿hasta cuándo dejarás que tu vida siga sin cambios significativos?
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Cada día cuenta
Cada día cuenta, cada día es muy importante para acercarte a esa tierra prometida. Comienza a correr, deja de dar vueltas en la miseria, en el desierto. Aléjate de las personas que no te sirven, deja de recibir cosas que no te edifican, de escuchar palabras de queja y derrota. ¡Es hora de ser el ser humano que Dios quiere que seas! Al igual que Josué y Caleb, decide entrar a esa tierra que te pertenece, que es tu herencia. ¿Dejarás que otro la reciba por ti? No te conformes con migajas. ¡Nuestro Dios es infinito!
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Repite en voz alta
Tu fe mueve la mano de Dios. ¿Cuál es tu deseo frustrado? ¿Cuál es tu problema? Si estás confundido, repite en voz alta: Recibo ahora claridad de Dios, recibo la respuesta a mis inquietudes en el nombre de Jesús, por las llagas de Jesús soy sano y libre de toda confusión. Quiero ser la mejor versión de la película de mi vida y estoy confiando en ti, Dios mío, para hacerlo realidad. Amén.
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Confiar y creer en Dios
El secreto está en confiar y en creerle a Dios. Él es fiel y leal a sus promesas, por lo tanto, tus pensamientos y palabras deben ser así:
• Estoy a la expectativa de los que Dios hará. Tengo una sensación de alegría porque sé que se abre una puerta que nadie la cerrará.
• Me gozo en la respuesta de Dios, ya estoy disfrutando mentalmente de mi tierra prometida.
• Visualiza la respuesta, piensa en ella, dale gracias a Dios por esa respuesta inevitable y adóralo porque él no te fallara jamás. Dios es fiel siempre.
• No quiero retrasar ni un día más lo que Dios tiene, haré todo con la fe de que las cosas me sucederán. Pide todo lo que necesites, y espera con paciencia y fe.
• Pongo en mi corazón el deseo de escuchar la voz de Dios para mi vida. Creo que él me guiará en todo, confío en que el Señor me está guiando y camino en fe.
• Si tengo un problema, el Señor me ayudará a resolverlo. Puedo superar todo obstáculo y pecado porque él me ayuda y me perdona.
• Mi vida será cambiada cada día y seré totalmente feliz, próspero y saludable, para la gloria de Dios. Todo lo que Dios me quiere dar, lo puedo obtener porque Cristo me fortalece para eso.
Y a propósito, no te olvides de sonreír. Eres un modelo para toda una generación y el mundo te está grabando. ¡Y las cámaras nunca se apagan!
